Hay un tuit del Pedro Sánchez pre-presidente para cada situación de la vida

Hay un tuit del Pedro Sánchez pre-presidente para cada situación de la vida
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Mucho antes de acceder a la secretaría general del PSOE y accediera a la presidencia del gobierno, Pedro Sánchez Castejón ya tenía Twitter. Desde su entrañable anonimato, Pedro tuiteaba sobre las cosas que le gustaban de su vida. Hablaba del tiempo, de lo feliz que era con sus hijos, de la música que le gustaba y de la cantidad de horas que pasaba en el Congreso, trabajando. Cuando abandonó la confortable seguridad del desconocimiento, Twitter se mofó de él. Retorció sus palabras. Despedazó su tranquila y discreta existencia en esta nuestra red social.

Desde entonces, hemos descubierto que hay un tuit del Pedro Sánchez pre-presidente para cada situación de la vida. Hoy, en el día de su definitivo ascenso a la presidencia del gobierno tras una sesión de investidura exitosa, recopilamos algunos de ellos.

Cuando te invitan a una fiesta y está llena de gente que no conoces.

Cuando vas a sacar dinero al banco pero los pensionistas ralentizan el ritmo.

Cuando estás deprimido a la vuelta de vacaciones.

Cuando te acuerdas de aquel exnovio raro con el que saliste un año.

Cuando te quedas sin conexión a Internet.

Cuando te dejas las luces del coche encendidas, te vas a la oficina, vuelves y te quieres morir.

Cuando quedas a tomar un café con las amigas de tu novio/a y tienes que disimular que te caen bien.

Cuando pasas del ciclismo durante todo el año pero cómo mola el Tour, yo soy muy del Tour.

Cuando LinkedIn te peta el correo.

Cuando vives en una piña debajo del mar.

Cuando te quedas hasta las 3 de la mañana con tus colegas comentando un partido de la NBA.

Cuando buscas en TripAdvisor "buen restaurante mexicano en Madrid".

Cuando cortas con tu novio/a y ya no tienes que fingir que te caen bien sus amigos/as.

Cuando eres un solo ser con el sofá.

Cuando lo dejas caer así como quien no quiere la cosa.

Cuando eres capaz de prever la de despidos que van a caer en la empresa de tu amigo.

"Buf, quita, que no doy de mí en el trabajo".

Cuando te están timando y lo sabes.

Cuando eres un seriéfilo.

Cuando encuentras el restaurante mexicano que buscabas y lo cuentas en TripAdvisor.

Cuando se te cae el teléfono por las escaleras pero la culpa es de la compañía.

Cuando te das cuenta de la alienación que la tecnología produce en la sociedad moderna.

Cuando reivindicas el derecho de todo el mundo a tener cumpleaños.

Cuando vives en 2001.

Cuando te molan Oasis pero aún no has descubierto a The Stone Roses.

Cuando te pones poeta de buena mañana.

Cuando pinchas una rueda en plena N-330.

Cuando eres de Madrid y llueve en Madrid y tienes que contar cómo está lloviendo en Madrid.

Cuando todo el mundo critica a tu colega pero sólo tú ves lo mucho que vale.

Cuando vas al dentista.

Cuando aún dices "chachi piruli" o "¡ya ves truz!" y te levantas contento una mañana.

Cuando por fin has visto a tu grupo favorito en tu festival favorito.

Cuando no sabes ni en qué día vives.

Cuando le das las buenas noches a Twitter.

Cuando te mola tu amiga de toda la vida pero sólo quieres tener sexo sin que se complique todo.

Cuando votas a Bildu.

Cuando de repente te quedas sordo y todo te suena bien.

Cuando acabas de llegar a un grupo y quieres hacerte amigo de la gente muy rápidamente.

Cuando estás hecho todo un padrazo.

Cuando te has leído el último de Coelho.

Cuando tuiteas gifs de animales porque son una monada.

Cuando tienes que elegir entre Casillas y Mourinho.

Cuando eres anticapitalista.

Cuando hace muchos años que no juegas al Pro y retas a tu primo de doce años.

Cuando hace mucho frío.

Cuando se muere David Bowie y le quieres dedicar un homenaje.

Cuando te levantas aún borracho.

Cuando le envías el mensaje a la persona equivocada.

Cuando eres Flanders.

Cuando estás así como triste y alicaído pero no sabes muy bien por qué.

Cuando has discutido con tus padres por teléfono y ahora te sientes mal.

Cuando te han dado una paliza en un debate electoral.

Cuando te va mal en el curro.

Cuando ha perdido tu equipo.

Cuando estás harto de tu jefe pero no sabes cómo decirlo porque te sigue en Twitter.

Cuando rompes con tu pareja.

Cuando escuchas a Los Planetas demasiado.

Cuando te has tomado unas cuantas copas de más y estás en esa fase de exaltación de la amistad.

Cuando no sabes utilizar el imperativo.

Cuando sigues sin saber utilizar el imperativo.

Y por supuesto.

Cuando Twitter se cae.

Comentarios cerrados
Inicio