El día en que los Beach Boys estafaron a Charles Manson y le tangaron una canción

El día en que los Beach Boys estafaron a Charles Manson y le tangaron una canción
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1968 no era un buen año para los Beach Boys. El que había sido el grupo perfecto de América, la imagen del sueño californiano, los niños buenos, guapos y rubios logrando un hit tras otro, llevaba un tiempo embarrancado. Aunque creativamente esta etapa tiene algunas de sus mejores canciones, ellos estaban derruidos moral y hasta físicamente. Brian Wilson, el cerebro del grupo, se pasaba el día encocado, zampando hamburguesas, batidos y kilos de helados y sin salir de su casa.

En ese 1968, Dennis Wilson, el más guapo de todos, el más salvaje también, prometió una casa y un Rolls Royce a Charles Manson si le dejaba publicar una de sus canciones. En 1969, 'Never Learn Not To Love' salió publicada en 20/20, el disco de aquel año de los Beach Boys. Unos meses más tarde, el estafado Manson cometió los asesinatos rituales más famosos de la era hippie. Entre ellos, el de Sharon Tate, embarazada de ocho meses.

Guía del autoestopista fumado

Una tarde de primavera de 1968, Dennis Wilson recogió a dos mujeres que hacían autoestop en Malibú, las llevó a su casa y folló con ellas. Se llamaban Patricia Katie Krenwinkle y Ella Jo Bailey y no conocían de antes a Wilson, pero aquella era la época del amor libre y Dennis nunca había tenido problemas en reconocer lo mucho que le gustaban las mujeres. Después, se fueron de allí, se dijeron adiós y Dennis se marchó de juerga.

Cuando volvió a su casa en la noche de ese día primaveral, ciego como siempre, alguien le asaltó casi a las puertas y se arrodilló para besarle los pies.

—¿Vas a hacerme daño?
—¿Tengo pinta de querer hacerte daño, hermano? Sólo soy un amigo. Llámame Charlie.

¿Habríais desconfiado? Puede, pero en casa de Dennis Wilson quince chicas bailaban semidesnudas, escuchando a los Beatles. Recientemente divorciado y con el grupo pasando por una de sus peores rachas, Wilson prefirió dejarse llevar. Y empezó una relación con la Familia Manson que duraría muchos meses y de la que se arrepentiría sólo un año después.

Manson
Manson en los días previos a su juicio, ya detenido. (George Brich/AP)

Sexo salvaje y compañía. Eso es lo que Manson y sus chicas ofrecían a un Dennis Wilson que, por otro lado, parecía no necesitar nada más. La Familia se instaló en la mansión de Sunset Boulevard y Dennis pagó todos sus gastos. Daba lo mismo que fuese arreglar un Mercedes Benz completamente destrozado tras un accidente, la ortodancia de Sadie Mae (la favorita de Charles Manson) o la comida del día a día. A Dennis, a la altura de 1968, aquello le fascinaba:

A veces me asusta el Mago, Charlie Manson, un amigo mío que afirma ser Dios y el Diablo, canta, toca y escribe poesía. Tal vez pronto lo fichen en Brother Records.

Brother Records era el sello de los propios Beach Boys. Y Manson empezaba a cotizar alto: por ejemplo, Neil Young se codeaba con él y lo admiraba como "un poeta en potencia".

Dennis se encandiló con Charlie. Le oía recitar los versos de sus futuras canciones y le vio como una estrella en ciernes. Convenció a varios de sus amigos de que era un diamante en bruto y de que le produjesen una maqueta. Entre esos convencidos estaba Terry Melcher, productor musical, descubridor de los Byrds y propietario de una casa en Cielo Drive. La misma que en la madrugada del sábado 9 de agosto de 1969 sirvió de escenario para los asesinatos de cinco personas (seis si contamos el bebé de ocho meses que Sharon Tate llevaba en su vientre, fruto de su matrimonio con Roman Polanski).

Gracias a la mediación de Dennis Wilson, Charles Manson grabó unas cuantas canciones, en unas sesiones que terminaron cuando el propio Charlie amenazó al ingeniero de sonido, Stephen Desper, con un cuchillo.

Ninguna de esas canciones se publicó de inmediato. Nadie quiso seguir adelante con los planes de convertir a Manson en una estrella del pop. Y, cuando la primera de ellas vio la luz en 1969, el nombre de Charles Manson no aparecía por ninguna parte. 'Never Learn Not To Love' se lanzó en 20/20 acreditada a Dennis Wilson, en letra y música. "(Lo que me han robado) es mucho más que una sola canción", le contó Charles Manson a la revista Seconds ya en la cárcel. Según Manson, la conversación había sido así:

—[Chalres Manson] Dennis, me encanta esta casa.
—[Dennis Wilso] Te la regalo si me ayudas a componer algunas canciones y me enseñas a interpetarlas a tu manera. Quiero publicar un disco en solitario.
—Vale, te ayudaré.
—Entonces, considera esta casa como tuya.
—¿Y qué me das por esta canción ('Cease to Exist')?
—Te regalararé mi Silver Cloud.
—Ok, pero dame los papeles de propiedad.
—Se los tengo que pedir a nuestro agente, el coche está a nombre de nuestra empresa.

Para Manson, fue una pequeña gran traición: "Y siempre me daba largas, no querían pagarme, me debían la casa y el coche, pero no querían... ¡Joder, no me dieron una mierda".

La sumisión es un don, venga, dáselo a tu hermano

Pretty girl, pretty, pretty girl
Cease to Exist
Just come and say you love me
Give up your world
C'mon on you can be
I'm your kind, oh your kind
And I can see
Walk on, walk on
I love you pretty girl
My life is yours and
You can have my world
Never had a lesson
I ever learned
But I know we all get our turn
I love you
Never learn not to love you
Submission is a gift
Go on, give it to your brother

Ésa es la letra original de 'Cease to Exist', la canción que los Beach Boys robaron a uno de los asesinos más famosos del siglo XX. Dennis Wilson retocó varias líneas de la original de para hacerla menos agresiva, le cambió el título a 'Never Learn Not To Love' y consiguió incluirla como suya. Nunca reconoció lo contrario y todas las biografías oficiales del grupo pasan por encima de su relación con Manson.

Cease to Exist, por cierto, también sirvió de inspiración para la primera línea de 'Wave of Mutilation', de los Pixies, cuya primera estrofa narra un suicidio como el que Dennis Wilson no se atrevió a mantener en la letra de 'Never Learn Not To Love'.

En su versión Beach Boys, el tema en sí comienza con un aire algo fantasmagórico en su intro y rápidamente se contagia de la atmósfera optimista y bucólica de los Beach Boys de inicios de los años 70 (que no la expansiva y adolescente de los 60). No es una de las grandes canciones de la carrera del grupo, pero en el estribillo (Never had a lesson I ever learned / I know I could never learn not to love you Come in now closer / Come in closer closer closer ahhhh) muestra a un Dennis Wilson mucho más rotundo y visceral de lo habitual. Una vena que explotaría en su cortísima carrera en solitario (donde brilla el maravilloso Pacific Ocean Blue).

Charles
"Wouldn't it be nice tangarle una canción a Charles Manson?".

20/20, con la canción robada, se publicó el 10 de febrero de 1969. Los asesinatos de Cielo Drive ocurrieron el 9 de agosto de ese año. Dennis Wilson murió ahogado, en plena borrachera, el 28 de diciembre de 1983. Tenía 39 años y se había puesto a bucear, buscando unas cosas que se habían caído por la borda de su yate el día anterior. Dennis era, paradójicamente, el único de los Beach Boys que sabía hacer surf.

El hermano mediano de los Wilson jamás llegó a reconocer que 'Never Learn Not To Love' fuera una canción del psicópata desquiciado de Charles Manson. Ni siquiera cuando Charlie se plantó en las puertas de su casa, de nuevo, y le regaló una bala:

—¿Y eso qué es?
—Es una bala. Cada vez que la mires, quiero que pienses en lo bonito que es que tus hijos aún estén a salvo.

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