Ramoncín, el saco de boxeo favorito de Internet. Años ha del apogeo de la SGAE como el ser más odiado del universo, atrás (no tan atrás) quedaron las polémicas sobre el futuro de la música y el streaming, pasado son las manifestaciones de los artistas en busca de alguien que les continuara defendiendo. Todo aquello es historia. Nuestro odio a Ramoncín no: continúa de plena actualidad.
El proceso judicial en el que se ha visto envuelto a raíz del Caso SGAE y que podría dar con sus huesos en la cárcel ha vuelto a hacer de Ramoncín el blanco de todo chiste imaginable. En el colmo del humor involuntario, el artista ha anunciado que deja los escenarios temporalmente, dejando el chiste hecho a la siempre ávida comunidad tuitera. Internet, allí donde la gracia de cualquier hecho o personaje dura un pestañeo, ha entronado a Ramoncín como su perfecto antihéroe.
De modo que es de rigor preguntarse: ¿queda alguien en España que aún se declare fan de Ramoncín? O mejor dicho: ¿hay alguien capaz de sentir empatía por él? Nosotros nos hemos propuesto buscarlo, y esto es con lo que nos hemos topado en el proceso.
Una aproximación estadística al fan de Ramoncín
A la hora de embarcarnos en tan excitante investigación, hemos hecho lo que cualquier ser humano con conexión a Internet hubiera hecho: tirar de Google. La primera página de resultados es poco alentadora: varias entradas de Facebook haciéndose la misma pregunta que nosotros.
¿Puede? ¿Puede ser posible?
Veamos qué dicen las redes sociales. Ramoncín tiene 15 fans en Tastebuds, una no especialmente transitada red social sobre música y gustos músicales. En Last FM, algo más célebre, el volumen de oyentes aumenta de forma notoria: hay al menos más de 10.000 personas que le han escuchado desde que fuera fundada la web para todos los melómanos yonkis de las estadísticas. En total, sus canciones acumulan más de 50.000 scrobblings. Leño, en comparación, tienen 37.000 oyentes.
Los héroes que son oyentes frecuentes de Ramoncín son los siguientes, según Last FM: alexcortinas, enBlanco2008, txemaquin y davidmxdf. Hay muchos más, pero pocos se animan a escribir en el tablón del perfil del artista. Ahí son mayoría quienes le odian o detestan su música. Es normal: en general, Internet prima el odio sobre el amor. En el caso de Ramoncín, lo monopoliza.
Acudimos a las redes. Es obvio que Ramoncín no se ha preocupado por cultivar su perfil social. En Twitter no tiene más de 500 seguidores, números modestos incluso para un grupo amateur que acaba de empezar en el negocio. En Facebook no pasa de 1800 "Me gusta", una cifra muy baja para un hombre de su trayectoria. Su canal de YouTube tiene algo más de éxito, aunque tampoco son números para tirar cohetes: 592 suscriptores.
Sumando todos estos números, podemos contabilizar al menos a 13.611 personas que o bien han escuchado de forma lateral a Ramoncín, o bien son oyentes habituales, o bien se han dignado a seguirle en alguno de sus múltiples perfiles en redes sociales. Aproximadamente el 0,029% de la población española tiene algún tipo de relación pública con Ramoncín.
¿Puede este bebé punky tener más fans que Ramoncín? Dado que la página en cuestión acumula 842 "Me gusta", podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que no. Ramoncín 1, bebé punky 0.
Los fans de Ramoncín viven en Teruel
Ya conocemos el perfil cuantitativo de los fans de Ramoncín. ¿Qué hay del cualitativo? Qué se dice sobre ti es casi tan importante como cuántas personas lo han dicho (y cuántas veces). De modo que hemos hecho lo que cualquier periodista de investigación hubiera hecho en estos casos: acudir al foro oficial del artista en cuestión. Para nuestra desgracia, no existe. De modo que hemos recurrido una vez más, sin que sirva de precedente, a nuestro amigo Google.
Ramoncín es sin duda cosa del pasado. Quienes más hablan de él en términos positivos son foros tan abandonados, como la misma idea del foro
Una de las primeras referencias que hemos encontrado sobre Ramoncín en términos positivos es este blog alojado en Blog Diario, de Hispavista. La última entrada fue publicada en 2011, hace bastante tiempo en términos digitales. La firma el propio Ramoncín, al igual que la mayoría. De modo que a pesar del pomposo título ("Ramoncín y amigos") no lo consideraremos una fidedigna muestra de amor.
Ramoncín es sin duda cosa del pasado. Quienes más hablan de él en términos positivos son foros tan abandonados como la misma idea del foro. En el de "Soloespolítica" encontramos esta sugerente entrada: "Fans de Ramoncín: aquí tenéis una canción", y un enlace a un videoblog de El Mundo. Data de 2012. Dentro del foro, nadie responde a la llamada. ¿Fans de Ramoncín, estáis ahí?
Sin duda, el mensaje más cariñoso y entusiasta para con Ramoncín lo hemos encontrado en un foro alojado en "Springsteen Corner". Allí, este mensaje de 2004 escrito por Gloria y titulado "Ramoncín en Teruel" reza lo siguiente. Es puro entusiasmo.
Buenas noticias para Ramoncín: en la provincia aragonesa podría contar con un importante nicho de seguidores orgullosos de serlo, a tenor de esta prueba. ¿Es Teruel la última reserva del fan de Ramoncín? Quizá sí, quizá no. La primera respuesta al mensaje de Gloria es la siguiente: "Por favor, no lo hagas. Aqui la mayoría salvo vosotras tres y mmario (que yo creo que lo hace por quedar bien con tu hermana) odiamos al pequeñajo ese con orejeras".
Rebucando en la prehistoria de Internet encontramos más muestras de cariño a Ramoncín. Esta, en concreto, data de 2008. Se trata nada menos que de una página tributo, hoy ya desactivada, titulada "Ramoncineros". El usuario detrás de esta idea, "karlitos", de Burgos. El lugar donde fue difundida (con poco éxito), un foro de boards4.melodysoft.com.
Hay más: en el foro de Manerasdevivir.com se puede encontrar una conversación entre varios usuarios discutiendo sobre cuál es el mejor disco de la carrera de Ramoncín. ¿El mensaje que introduce el hilo?: "Es difícil, porque Ramoncín no tiene ningún disco malo, pero tengo especial debilidad por 'Como el fuego'". Se trata sin duda de la mayor congregación de fans de Ramoncín de todas cuantas hemos localizado a lo largo y ancho de Internet.
Ramoncín en la prensa: aún hay defensores
La relación de Ramoncín con la crítica musical nunca ha sido la mejor. La legendaria entrevista que le hizo Santi Carrillo en Rockdelux es sólo la prueba más evidente de una historia agridulce. Ramoncín llegó demasiado pronto a La Movida, fue criticado con fiereza por la misma y después jamás logró jugar (a nivel crítico) en la misma liga que otros pioneros del Punk o del Rock Urbano en España. Su personaje, siempre controvertido y ficticio, jamás le ayudó.
Con todo, su carrera siempre ha tenido defensores. Cada vez son menos, pero existen. Y argumentan sus motivos en público. En el blog Rock and Marcos encontramos a uno de los últimos defensores públicos del artista madrileño. En concreto, a través de una lista de sus 15 mejores canciones. En Margen Izquierda Rafa Calero ofrece diez motivos por los que le gusta el autor madrileño. Y aquí incluso se puede descargar su disco recopilatorio, tras una reseña positiva.
A día de hoy pocas publicaciones críticas musicales españolas hablan en términos positivos (o hablan para algo) de la carrera musical de Ramoncín, eclipsada como ha quedado por su papel dentro de la industria, de la SGAE y como némesis de todo en lo que un usuario de Internet cree. Si hay una revista capaz aún de rescatar algo de la trayectoria de Ramoncín, esa es Efe Eme. En concreto, en este reportaje firmado por Darío Vico en octubre de 2011 y en este otro firmado por Juan Puchades.
Y por último, la más reciente defensa de Ramoncín en un medio, en este caso en Sabemos. El artículo/defensa en cuestión lo firma David Martínez Pradales y se titula "En defensa de Ramoncín", un postulado indudablemente underground y contracultural en nuestros días. Dice así:
Mucho antes de convertirse en esa luminaria renacentista, que podría haber vendido sus proyectos al mismísimo Steve Jobs, incluso antes de presentar el concurso televisivo “Lingo”, de editar su “Tocho cheli”, de actuar en el cine o hacerse la rinoplastia, Ramoncín fue un precursor del rock urbano, también del punk, y compartía público y cazadora de cuero con grupos como Burning, Leño o La banda trapera del río. Cierto es que nunca fue ni de lejos el Bruce Springsteen vallecano que le hubiera gustado ser, pero ¿quién podría serlo?
Como el propio Pradales reconoce, en su defensa se mezcla la idea del artista y sus vivencias personales. Pero en rigor, ¿qué defensa de un músico no se basa exactamente en eso?
En nuestro camino hacia el fan de Ramoncín hemos descubierto que aún quedan algunos vivos por la red, y que, en ocasiones, se manifiestan. No en demasía, pero lo hacen. Una prueba menor pero igualmente concluyente de que no todo el mundo le odia por defecto, pese a la imagen negativa que la red se ha creado de él durante la última década. No estás solo, Ramoncín.
