Es una de las noticias de la semana. Según El Confidencial, fuentes internas de El Ministerio de Economía y Empresa dicen que se va a elaborar una consulta pública con los agentes implicados para ver si se amplía el concepto de “operadores de servicios de telecomunicaciones”. En resumen, ver si las plataformas de streaming como Netflix o Youtube tienen que pagar la conocida como “tasa RTVE” que ya pagan las teles privadas y los operadores como Vodafone o Movistar.
¿Y tienen caso? Sí, la idea es que España puede implementar una directiva de la Comisión Europea de 2018 sobre telecomunicaciones que permitía la ampliación de ese concepto y que iba en la senda de permitir a cada país valorar si quiere tasar a las VOD o no.
En parte, el truco estaba en que hasta ahora las compañías se libraban de tributar allí donde no tuviesen su sede fiscal, pero ahora se centrarán en tasar dependiendo de en qué paises operen. En estos últimos dos años Alemania y Francia se han puesto a la cabeza de este movimiento para añadir las plataformas online como fuentes de ingresos a sus televisiones e industria cinematográfica, como venían haciendo, al igual que España.
¿Cuánto les están cobrando? Alemania pide un 1.8% de los beneficios anuales de las empresas de servicios de telecomunicaciones que facturen menos de 20 millones y un 2.5% para los que superen esos 20 millones. En Francia Netflix, Apple, Google y Amazon para un 2% sobre sus beneficios anuales. Según El Confidencial, la horquilla que manejan los españoles es una imposición de entre el 0.85 y el 1.35% de los ingresos de estas plataformas.
¿A qué viene este impuesto ahora? Principalmente a que los rivales se habían molestado de lo que consideraban una competencia desleal. Teles y operadoras llevan años intentando anular jurídicamente y sin éxito la “tasa RTVE”, que también se paga en los países mencionados y en otros como Bélgica o Gran Bretaña. Estos agentes se han quejado al Gobierno de la ventaja de las nuevas VOD (también conocidas como over the top u OTT), y la respuesta, en lugar de ser el ofrecimiento de una redistribución del impuesto entre viejos y nuevos agentes, va en la senda de añadir más recaudación para las arcas.
“Europeizar” Netflix: a partir de 2020 Europa también aplicará una normativa ya anunciada que obligará a las nuevas plataformas a seguir las mismas normas de promoción de la producción europea por la que se rigen teles privadas o cines. Sus catálogos (HBO, Netflix, Prime) deberán ser al menos en un 30% contenido europeo, aunque aún no está del todo claro el criterio de análisis, si el porcentaje de contenido dependerá del número de títulos disponibles, del número de horas reproducidas, del número de episodios o qué. Ello provocará una acción multilateral: eliminación de contenidos norteamericanos y mayor producción nacional.
Y “netflixizar” las televisiones europeas: Europa también ha decidido luchar contra esa vulnerabilidad de su sistema audiovisual poniéndose frente a frente. Las principales cadenas públicas de Italia, Francia y Alemania trabajan ya conjuntamente para poner en marcha una plataforma internacional de VOD. Como publicaba ADSLZone, a esta alianza podrían sumarse más adelante otros países como España (con RTVE), Bélgica (con la RTBF y la VRT) o Suiza (RTS).
El canon digital: en otras noticias relacionadas, el famoso canon a DVD y BluRays (y también desde hace menos años discos duros y memorias USB) había pasado de los 18 millones de euros recaudados en 2012 a los 7 en 2017. Sin embargo, en 2018 la cifra ha subido de golpe hasta los 70 millones. ¿Qué ha ocurrido? Una ampliación de los productos tasables: como ahora podían gravarse smartphones, smart tvs y altavoces inteligentes, ha entrado mucho dinero por ahí, justo por el tipo de producto con el que vemos nuestro streaming.
