“Detección precoz, diagnóstico precoz, aislamiento de los casos y cuarentena de los contactos, esa es la receta. Si bajamos los brazos estaremos condenados, y de nada habrá servido parar un país entero”, dice Juan Martínez Hernández, experto en Salud Pública de la Organización Médica Colegial.
Ha contado ayer para El Mundo que el “pecado original” de la mala gestión de esta epidemia en multitud de países ahora afectados ha sido técnico y no político. Por ejemplo, en una reunión a la que él asistió el pasado 30 de enero ante el Ministerio de Sanidad la mayoría de técnicos sostuvieron que el covid-19 era un agente del grupo 2 cuando según su criterio parecía postularse a entrar en el grupo 4. Esto ha retrasado y debilitado nuestra preparación ante lo que iba a llegar. La frase entrecomillada es la línea que, bajo su criterio, deberíamos adoptar ya mismo para no empeorar la situación aún más.
El experimento de Vo'
Como sabemos ahora, la respuesta de la mayoría de territorios italianos también ha sido tardía. No ha ocurrido así en Vo', una pequeña localidad con 3.300 habitantes cercana a Venecia, en el epicentro del brote en este país, y que ha conseguido erradicar el virus.
“Hemos sido capaces de contener pudimos contener el brote porque hemos identificado y eliminado las infecciones “sumergidas” y después los hemos aislado”, contó Andrea Crisanti, experto en infecciones en el Imperial College London y uno de los responsables del ensayo patavino.
El 22 de febrero se realizó un test de todos sus residentes, no sólo de los que presentaban síntomas. Se encontró que el 3% de la población estaba infectada, y más de la mitad de ellos eran asintomáticos. Se aisló a todos ellos. Diez días después se realizó otro test masivo. Sólo un 0.3% de infectados, seis personas, probablemente por algún error en la prueba o porque estaban todavía en una fase de incubación demasiado temprana para que los métodos de testeo lo registrasen. Se aisló de nuevo a estos seis individuos y a día de hoy son una comunidad libre de covid-19.
Expansión a Veneto y el cambio de estrategia de España
Ahora las autoridades de Veneto, la región dentro de la que se encuentra Vò y que cuenta con casi cinco millones de habitantes, plantean llevar el mismo régimen de testeo agresivo en toda la región. Dado que hay escasez de recursos, van a priorizar las recogidas de las 11.000 muestras diarias de las que disponen de la siguiente manera: si llama alguien diciendo que está enfermo con síntomas de coronavirus, se le hará la prueba a él, a toda su familia, a todos sus contactos recientes e incluso a todo el edificio en el que viva.
“Tests, tests, y más tests: éste es nuestro mensaje clave” ha dicho Tedros Adhanoml, el actual director de la OMS, que cree que el mundo está ante un gran reto de “solidaridad”. La OMS ya había criticado la estrategia de varios países, incluido España, de hacerle sólo pruebas a los pacientes con los síntomas más severos, aunque eso cambiará hoy mismo cuando el Gobierno ha autorizado que se sustituya la prueba diagnóstica de la PCR (muy fiable, relativamente compleja y para la que España no se había preparado mientras que países como Corea del Sur sí) por los tests serológicos (mucho más rápidos pero también más imprecisos).
La detección es el paso uno, lo que vendrá después también es duro
Vo', al igual que China, han conseguido erradicar al virus de sus calles, pero su población sigue siendo vulnerable a este agente. Nada impide que, de relajarse la vigilancia, el brote aparezca de nuevo. El siguiente punto en la agenda será evitar una segunda oleada.
El covid-19 es aún un virus sobre el que desconocemos muchas cosas, y aunque se cree que las altas temperaturas podría acabar con él aún no hay certezas. Los test permiten aislar y cercar al virus y las inspecciones multitudinarias y programadas pueden refrenar la aparición de nuevos brotes. Son el camino a seguir en el corto plazo. Pero el control postcuarentena hasta que sepamos todo lo necesario sobre el coronavirus y consigamos vacunar a la mayoría de la población va a implicar enormes esfuerzos con consecuencias humanas y económicas aún por determinar.
