La caída en picado en las tasas de natalidad de cientos de países del mundo está acelerando una crisis demográfica preocupante. Y aún así, más de 140 millones de bebés nacen en el mundo cada año. Esto se traduce en cuatro nacimientos cada segundo que pasa. Y más de la mitad de todos los nacimientos tienen lugar en Asia. Más concretamente en India y China: 25 millones y 16 millones cada año respectivamente.
Si juntamos los datos podemos ser capaces de responder a la hipotética pregunta de "¿Dónde nacerán los próximos 1000 bebés del mundo?". De hecho, este gráfico realizado por Pratap Vardhan y publicado en Visualcapitalist usando datos del World Factbook de la CIA lo ilustra, mostrando qué países tienen más probabilidades de dar la bienvenida a los próximos recién nacidos apoyándose en las estimaciones de población y tasas de natalidad de 2022.
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Que el país que acumule más nacimientos sea India no nos sorprende, y más teniendo en cuenta que tiene una población de casi 1.400 millones. En Magnet hemos hablado de su demografía extensamente. Prestando atención al gráfico, 172 de esos 1.000 bebés, nacerán allí. Aunque hay que mencionar que aunque lidere la lista, también se encuentra por debajo de la media mundial en cuanto a tasa de natalidad: 16,8 en comparación con 17,7. La tasa de natalidad se mide con el número total de nacimientos en un año por cada 1.000 personas.
China se sitúa en el puesto número dos, también con una población inmensa pero con una tasa de natalidad baja y cayendo en picado durante los últimos años. También hemos hablado de este fenómeno en Magnet. Pero lo que más nos sorprende es que Nigeria se encuentre en el puesto número 3 de la lista. ¿Por qué tanto? Por su altísima natalidad: tiene una tasa que casi duplica la media mundial: 34,2. Hay varios factores que explican esta tendencia, como su economía pobre (puesto 131 a nivel mundial en términos de PIB per cápita) y un acceso a la educación para las mujeres aún muy precario.
Según un estudio de The Lancet, el pico de población se alcanzará en la década de 2060, con 9.700 millones. Y luego la humanidad se irá reduciendo hasta quedarse en los 8.800 en 2100. Estos cambios demográficos se explican por muchos motivos como un aumento de riqueza en el mundo, que se correlaciona con menos nacimientos, más educación, el éxodo del mundo rural a las ciudades o políticas gubernamentales que lo desincentivan (como la polémica política de un solo hijo en China).
Este déficit de nacimientos hará que la edad media mundial siga aumentando, lo que pondrá contra las cuerdas a los países, económicamente hablando. En otras palabras: viviremos en un mundo con una sociedad cada vez más envejecida, incapaz de producir lo mismo.
Gráfico: Pratap Vardhan (Stats of India), publicado en Visualcapitalist.
